martes, 4 de octubre de 2011

Jornada sobre Mutilación Genital Femenina: reflexiones y retos, celebrada en Barcelona

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), unos 130 millones de niñas y mujeres han sido víctimas de la mutilación genital femenina (la extirpación parcial o total de los órganos genitales femeninos sin fines terapéuticos), que se practica en 28 países de África Subsahariana y Oriente Medio. "A pesar de que en España la ablación se considera un delito desde el año 1995, el riesgo llega cuando las familias viajan a sus países de origen", ha explicado Álvaro González, presidente de Médicos del Mundo España, que en 2007 puso en marcha varios programas en Cataluña, Navarra y Aragón para prevenir la mutilación genital femenina.
"La mayoría de los inmigrantes subsaharianos que viven en España residen en estas comunidades", ha apuntado. Sólo en 2010, Médicos del Mundo atendió a 1.117 personas de países en los que todavía se realiza la ablación, como Camerún, Gambia, Mali, Ghana, Nigeria y Senegal. "Nuestro objetivo es sensibilizarlas de los riesgos y modificar las creencias erróneas asociadas a esta práctica". Así, Médicos del Mundo organiza grupos de debate con hombres y mujeres subsaharianos y contacta con líderes comunitarios y religiosos para promover un cambio de valores.
Dos de las mediadoras socioculturales que tiene Médicos del Mundo, Bai Sanday e Isatou Gerew, ambas de Gambia, juegan un papel fundamental. "Mucho más que unas simples traductoras", como ha señalado Julia Moreno, coordinadora de Inclusión Social de Médicos del Mundo Aragón. Cuando una mujer de un país de riesgo acude al médico, "hacemos de traductoras y aconsejamos a los profesionales sobre cómo relacionarse con ella", ha explicado Bai Sanday. En el caso de que se detecte riesgo de mutilación, "les decimos que la ablación no supondrá ninguna ventaja para la niña", ha señalado Isatou Gerew.
Una de las grandes dificultades para erradicar la mutilación genital femenina son las creencias erróneas de que esta práctica es una exigencia de algunas religiones o es beneficiosa para la higiene, la identidad de la mujer, contraer matrimonio… "cuando, en realidad, las consecuencias físicas son terribles. Y también las psicológicas, más difíciles de medir, pero que pueden ser ansiedad, episodios de terror, problemas en las relaciones sexuales, problemas de pareja…", ha relatado Julia Moreno.

Por eso, Médicos del Mundo se centra en la prevención. "Damos información directa a los familiares y también formamos y sensibilizamos a los profesionales sanitarios, como pediatras, ginecólogos, médicos de atención primaria, matronas y enfermeras, que son los que están en primera línea".
La mutilación genital femenina no es únicamente un problema médico. Se trata también de un conflicto de valores. Como ha explicado Teresa Arana, pediatra y vocal del Comité de Ética Asistencial del Sector Zaragoza II, "hay un choque de valores entre cómo ven la ablación la sociedad de acogida y la sociedad inmigrante. En esta línea hay que conseguir un cambio sociocultural entre inmigrantes mediante un diálogo respetuoso, ya que sólo con la ley no se conseguirá casi nada". Teresa Arana, pediatra, ha alertado de la necesidad de que los profesionales sanitarios se ganen la confianza de los pacientes "informando de los riesgos de la ablación, preguntando con respeto a las mujeres si han sido mutiladas y si piensan practicarla con sus hijas". Así, cuando llegue el momento de un viaje al país de origen "el profesional tiene más confianza para informar de que la ley le obliga a avisar a las autoridades en caso de mutilación. En Aragón entregamos el Compromiso Preventivo para que firmen que se comprometen a no realizar la ablación a sus hijas. Es más que un documento legal; les da la fuerza moral para negarse a la ablación ante sus familiares alegando que está penalizada en España". Ver el artículo completo
Entrevista a Adriana Kaplan, experta internacional en mutilación genital





lunes, 3 de octubre de 2011

La preservación de fertilidad en niños depende de la terapia

La preservación de la fertilidad en niños y niñas continúa siendo experimental en determinados aspectos como enfermedad neoplásica, ya que deben definirse aún las poblaciones de riesgo. "En España se diagnostican alrededor de 900 nuevos casos de cáncer infantil al año y aproximadamente el 30 por ciento tienen altas probabilidades de desarrollar problemas de fertilidad en la edad adulta en relación con el tratamiento recibido", ha calculado José Sánchez de Toledo, jefe del Servicio de Oncología y Hematología del Hospital Valle Hebrón, en Barcelona, y coordinador del XVI Curso de Actualización en Oncología y Hematología Pediátricas, junto con Luis Cabero.

El tratamiento con dosis altas de agentes alquilantes, radioterapia abdominal y trasplantes alogénicos de médula ósea supone un mayor riesgo en este campo. Otra enfermedad que puede causar esterilidad en niños es el linfoma de Hodgkin tratado con los protocolos que se utilizaban hasta fechas recientes

"No todos los niños y niñas tienen el mismo riesgo de infertilidad. Existen dos factores principales: la edad en la que fueron tratados (antes o después del brote puberal) y los fármacos que se les administraron. Es importante conocer estas poblaciones para poder incidir de forma más precisa en ellas, en las que deben valorarse los diferentes parámetros de posible pérdida de fertilidad, para ver si estos pacientes son susceptibles de beneficiarse de técnicas para preservar tanto la fertilidad como la función hormonal", ha precisado.

La diferencia fundamental entre el tratamiento de niños y el de niñas no se produce tanto en función del sexo sino de la terapia previa que han recibido. De este modo, existe más riesgo de infertilidad si el tratamiento se aplica en niños tras la pubertad que si se administra antes de que se produzca la división germinal de las células.

Existen aspectos ya consolidados en este campo desde hace años, como la preservación de la fertilidad en niños púberes mediante conservación y congelación del esperma. También en niñas se separan los ovarios fuera del campo de radiación mediante ovariopexia cuando se administra irradiación abdominal.Otros campos específicos son más novedosos, con técnicas como congelación de tejido ovárico para su posterior reimplantación que puedan preservar tanto fertilidad como función hormonal en pacientes que han recibido quimioterapias o radioterapias.

"Estamos investigando cómo preservar la fertilidad a través de congelación del tejido ovárico y la vitrificación: es un campo pionero", ha señalado que el experto, y ha apuntado además la necesidad de trabajar en unidades multidisciplinares en las que, desde diferentes especialidades, "se estudien a fondo las características del paciente, el riesgo de la pérdida de fertilidad y cómo puede actuarse en este paciente de la forma más adecuada posible para preservar la fertilidad y la función hormonal: no todos los pacientes requieren de este soporte multidisciplinar, pero probablemente sí un pequeño porcentaje de ellos. Y son esos a los que hay que ofrecer las mejores técnicas posibles para poder preservar los dos aspectos".
La preservación de tejido ovárico mediante su congelación antes de comenzar el tratamiento de determinadas enfermedades pediátricas como leucemias y linfomas conlleva el riesgo de transmisión posterior de células tumorales al implantar el tejido. En este sentido, José Sánchez de Toledo ha recordado que la indicación, por tanto, es no realizar estas técnicas. "Más adelante, posiblemente deberemos estudiar con detalle y con diferentes métodos la ausencia de tejido tumoral".







Recursos on-line: Decisiones sexuales saludables

En la página http://www.youngwomenshealth.org/ , del Center for Young Women´s Health (Children´s Hospital Boston) disponemos de información y material didáctico para jovenes respecto a su salud. En concreto, destacamos un artículo sobre decisiones sexuales saludables, dirigido a jóvenes que están planteándose tener relaciones sexuales por primera vez. Incluye este interesante test:


TEST: ¿Estás lista para el sexo?


Pregúntate a tí misma lo siguiente para ver si estás lista para tener una relación sexual:


* ¿Es completamente una decisión tuya el tener sexo? (significa que no sientes presión de otros, incluyendo tu pareja, para tener sexo).


* ¿Es tu decisión tener sexo basada en las razones correctas? (No debería estar basada en presión por tus compañeros, el deseo de encajar en el grupo o por hacer feliz a tu pareja o por la creencia de que el sexo hará la relación con tu pareja más cercana o mejor. Si decides tener sexo, debe ser porque te sientes emocional y físicamente lista y tu pareja debe ser alguien que ames, confíes y respetes).


* ¿Crees que tu pareja respetaría cualquier decisión que tomaras sobre tener o no tener sexo?


* ¿Confías y respetas a tu pareja?


* ¿Eres capaz de hablar cómodamente con tu pareja sobre sexo y la historia sexual de tu pareja?


* ¿Tú y tu pareja han hablado acerca de lo que ambos harán si te embarazas o adquieren una Enfermedad de Transmisión Sexual (ETS)?


* ¿Sabes cómo prevenir el embarazo y las ETS?


* ¿Tú y tu pareja desean utilizar la anticoncepción para evitar el embarazo y las ETS?


* Mira dentro de tí misma. ¿Te sientes lista y completamente cómoda contigo misma y tu pareja para tener sexo?



Si contestaste que NO a cualquiera de estas preguntas, tal vez desees volver a pensar si realmente estás lista para el sexo. Si piensas que deberías tener relaciones sexuales porque otros lo quieren o sientes que deberías ya que todo el mundo las está teniendo, estas no son las razones correctas. Solamente debes decidir tener sexo porque confías en tu pareja y la respetas, conoces los posibles riesgos, sabes cómo protegerte contra esos riesgos, y lo más importante, ¡porque realmente sabes que tú estás lista!