domingo, 29 de julio de 2012

Embarazo en adolescentes: un problema culturalmente complejo

Ayana (nombre ficticio) se casó a la edad de 11 años. En Etiopía, la mayoría de las parejas recién casadas empiezan a tratar de concebir al poco tiempo de casarse. Tres años más tarde, gracias a la campaña Stop Early Marriage (Alto al matrimonio precoz), Ayana y su marido (cinco años mayor que ella) todavía asisten a la escuela y han retrasado el momento de tener hijos, según informa Helen Amdemikael, representante adjunta del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) en Etiopía.
El proyecto se está llevando a cabo bajo los auspicios del Ministerio de Juventud y Deportes del distrito y recibe asistencia del UNFPA y del Consejo de Población, una organización no gubernamental, así como orientación normativa y técnica de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Trabaja con las familias, los jefes de las comunidades y los adolescentes en la región rural de Amhara en Etiopía, donde la mitad de todas las adolescentes se casan antes de los 15 años de edad, lo que es contrario a la legislación etíope, que sólo autoriza el matrimonio a partir de los 18 años. El proyecto alienta a retrasar el matrimonio y la maternidad, y también presta apoyo a las adolescentes casadas mediante cursos de alfabetización y de aptitudes para la vida y proporcionando información sobre la salud reproductiva.
Esta joven adolescente de 16 años dio a luz en un hospital del estado del Gujarat en la India gracias a un programa gubernamental Amdemikael y otros expertos en salud tienen la esperanza de que historias como la de Ayana se repitan. Ya se trate de niñas novias en la India o en el Sudán, o de alumnas de enseñanza secundaria solteras en los países industrializados, el embarazo en adolescentes es uno de los principales factores que contribuyen a los problemas de salud y la mortalidad de la madre y el niño.
Las adolescentes menores de 16 años corren un riesgo de defunción materna cuatro veces más alto que las mujeres de 20 a 30 años, y la tasa de mortalidad de sus neonatos es aproximadamente un 50% superior, según el consultor en salud de los adolescentes James E Rosen, que está cargo de un estudio de investigación del departamento de Reducción de los riesgos del embarazo de la OMS. Los expertos en salud convienen en que las adolescentes embarazadas requieren atención física y psicológica especial durante el embarazo, el parto y el puerperio para preservar su propia salud y la de sus bebés.
"El contexto es complicado, porque las cuestiones culturales influyen en el comportamiento sexual", dice la Dra. Virginia Camacho, del departamento de salud y desarrollo del niño y del adolescente de la OMS.
Su departamento está estudiando los medios de prevenir el embarazo precoz - en particular entre las jóvenes marginadas - en los países en desarrollo y la medida en qué los sistemas de salud atienden sus necesidades."Los proveedores de salud deben estar capacitados para brindar atención adecuada a las adolescentes embarazadas y asesoramiento a las muchachas que no quieren quedar embarazadas", dice Camacho.
Se estima que 16 millones de niñas de edades comprendidas entre los 15 y los 19 años dan a luz cada año, y un 95% de esos nacimientos se producen en países en desarrollo, según el estudio realizado por Rosen. Esto representa el 11% de todos los nacimientos en el mundo. Sin embargo, los promedios mundiales ocultan importantes diferencias regionales. Los partos en adolescentes como porcentaje de todos los partos oscilan entre alrededor del 2% en China y el 18% en América Latina y el Caribe. En todo el mundo, siete países representan por sí solos la mitad de todos los partos en adolescentes: Bangladesh, Brasil, la República Democrática del Congo, Etiopía, la India, Nigeria y los Estados Unidos de América.
La Dra. Valentina Baltag, funcionaria médica de la OMS que trabaja en el tema de la salud de los adolescentes, dice que se necesita más información para orientar a este grupo de edad con programas adecuados: "No sabemos en qué grado los adolescentes buscan atención sanitaria y no tenemos datos desglosados por edad."
Según el Dr. Monir Islam, director del departamento de Reducción de los riesgos del embarazo, los programas de salud para madres y recién nacidos deben atender mejor las necesidades de las madres jóvenes. "Reducir los riesgos del embarazo para las adolescentes debe ser una prioridad clara para los países que se están esforzando por alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio", dice.
Aunque las circunstancias de los embarazos en adolescentes varían mucho, destacan algunos rasgos comunes: los cuerpos más jóvenes no están plenamente desarrollados para pasar por el proceso del embarazo y el parto sin consecuencias adversas. Las madres adolescentes se enfrentan a un riesgo más alto de parto obstruido que las mujeres de veinte y tantos años. Sin una atención obstétrica de urgencia adecuada, esto puede conducir a la ruptura del útero, que conlleva un alto riesgo de muerte tanto para la madre como para el bebé. Para aquellas que sobreviven, el trabajo prolongado de parto puede causar una fístula obstétrica, que es un desgarro entre la vagina y la vejiga o el recto, que provoca fuga de orina o heces. En Etiopía y Nigeria, más del 25% de las pacientes con fístula habían quedado embarazadas antes de los 15 años y más del 50% antes de los 18 años. Aunque el problema puede corregirse con cirugía, el tratamiento no está ampliamente disponible en la mayoría de los países donde se produce esta lesión y millones de mujeres deben resignarse a sufrir una afección que provoca incontinencia, malos olores y otros efectos secundarios como problemas psicológicos y aislamiento social.
"Una gran cantidad de mujeres embarazadas muy jóvenes no tienen acceso a servicios que les permitan ponerse en manos de profesionales capaces de atenderlas en caso de parto obstruido", dice el Dr. Luc de Bernis, asesor principal de salud materna en el UNFPA, destinado en Etiopía. Dado que en muchos países las niñas se casan muy pronto, incluso antes de empezar a menstruar, "podrá imaginarse que cuando se quedan embarazadas son muy jóvenes, no tienen más de 13 o 14 años", dice de Bernis. "Si va al hospital de la fístula en Addis Abeba, verá que las chicas son muy jóvenes y pequeñas, y enseguida entenderá la magnitud del problema. Es un desastre.
 La pobreza influye en la probabilidad que tienen las jóvenes de quedar embarazadas y si es así entran en un círculo vicioso, ya que la maternidad precoz suele comprometer sus resultados académicos y su potencial económico.
El embarazo en la adolescencia "puede perturbar el acceso a la educación y a otras oportunidades de vida", dice Leo Bryant, gerente de promoción en Marie Stopes International (MSI), un grupo británico de defensa de los derechos reproductivos que posee clínicas en todo el mundo. "En el Reino Unido nos preocupa en particular ... porque tenemos la tasa más alta de embarazos en adolescentes de Europa occidental". Hoy en día esa tasa es de 26 partos en adolescentes por cada 1000 mujeres, de acuerdo con las estadísticas sanitarias mundiales de 2009.
Otros países de Europa tienen menos embarazos de adolescentes porque adoptan un enfoque diferente con respecto a la educación sexual y facilitan el acceso a la planificación familiar, dice Bryant. En los Países Bajos, que posee una de las tasas más bajas de Europa de embarazos en adolescentes, de cuatro partos en adolescentes por 1.000 mujeres, la educación sexual comienza en la escuela primaria. Actualmente en el Reino Unido la educación sexual no es obligatoria en las escuelas, y algunas escuelas de inspiración religiosa ni siquiera imparten esa educación, por lo que la cobertura es irregular, dice Bryant. Se supone que esto cambiará después de que el Gobierno anunciara a finales de abril sus planes de hacer obligatoria la educación sobre el sexo y las relaciones en la enseñanza primaria y secundaria a partir de 2011.

Boletín de la Organización Mundial de la Salud . Recopilación de articulos. Volumen 87: 2009. Volumen 87, junio 2009, 405-484

domingo, 22 de julio de 2012

Tratamiento de los trastornos del desarrollo sexual: ¿Cómo debe realizarse el tratamiento de los bebés nacidos con ambigüedad genital?

En 2005, se presentó una nueva clasificación de los trastornos del desarrollo sexual (TDS) en la Conferencia de Consenso de Chicago con el propósito de poner al día y definir la terminología para los profesionales sanitarios y los pacientes, así como favorecer la mejora de la atención médica. Un TDS se definió como una condición congénita caracterizada por el desarrollo atípico del sexo cromosómico, gonadal o anatómico.
En este artículo de revisión recientemente publicado, los especialistas analizan el estado actual del conocimiento en este campo, centrándose en la situación aguda de "un niño recién nacido con ambigüedad genital cuando existe incertidumbre acerca del sexo de crianza del niño o cuando el fenotipo genital de éste al nacer no concuerda con el cariotipado prenatal".
Este artículo comienza con un apartado dedicado al desarrollo sexual normal para, a continuación, profundizar en la investigación clínica de la ambigüedad genital.
Según los autores, esta investigación debería ser exhaustiva y sistemática y se debería llevar a cabo lo antes posible. La finalidad de esta investigación es evaluar la producción de hormonas y determinar qué estructuras anatómicas están presentes a fin de averiguar si la diferenciación de sexos se ha visto afectada a nivel cromosómico, gonadal o de síntesis/acción hormonal.  
Los autores indican que el diagnóstico de ADN será una parte fundamental de la investigación. Dos extensos apartados del artículo están dedicados a las descripciones detalladas de las características genéticas y no genéticas de las diferentes formas de TDS gonadal y postgonadal.
Por último, se analizan las cuestiones relacionadas con la asignación del sexo, el tratamiento hormonal y la intervención quirúrgica. 
Los autores hacen hincapié en que los TDS constituyen un grupo heterogéneo de condiciones "con pronósticos y perspectivas de tratamiento sustancialmente diferentes". Los pacientes con TDS deberían ser atendidos por un equipo multidisciplinario especializado capaz de llevar a cabo una investigación clínica estructurada y exhaustiva". Barbaro M, Wedell A, Nordenström A. Disorders of sex development. Semin Fetal Neonatal Med. 2011;16:119-27.


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domingo, 15 de julio de 2012

El embarazo, amenaza de muerte para millones de adolescentes

 Cada año, 50.000 niñas y adolescentes mueren en todo el mundo durante el embarazo o el parto, en muchos casos porque sus cuerpos no están listos para la gestación. Millones quedan con secuelas.
El embarazo es la principal causa de muerte para las adolescentes de todo el mundo, cobrándose la vida de miles de ellas cada año o dejándolas gravemente enfermas, según denuncia la organización defensora de los derechos de la infancia Save the Children.
Puede resultar paradójico que el proceso por el que un ser nace a la vida se califique como el "mayor causante de la muerte de adolescentes" en el mundo, pero las cifras hablan por sí solas.
Los embarazos y partos causan anualmente el fallecimiento o serias lesiones a un millón de adolescentes, la mayor parte de ellas jóvenes de escasos recursos, con un difícil acceso a la educación y residentes en países en desarrollo.
El informe de Save the Children "El derecho de toda mujer: cómo la planificación familiar salva vidas de niños" muestra una realidad desoladora, pero al mismo tiempo ofrece algunos mecanismos para intentar revertir la situación.
La raíz del problema, dice Save the Children, está en la falta de acceso a métodos anticonceptivos y la poca planificación familiar que reina en muchos países, generalmente los más poblados del planeta.
Niñas y adolescentes de entre 15 y 18 años de edad se casan y quedan embarazadas poco después del matrimonio, cuando sus cuerpos aún no están preparados para gestar una vida.
No sólo eso. También el hecho de que se produzca otro embarazo demasiado pronto después de un parto, es peligroso tanto para la madre como para el bebé.
Según la organización, es cuestión de facilitar a las mujeres la elección sobre cuándo se quieren quedar embarazadas y cuánto tiempo quieren dejar pasar entre un embarazo y otro.
Permitir el acceso de las mujeres a la planificación familiar de manera que puedan retrasar la concepción por lo menos tres años después de haber dado a luz reduce el riesgo de complicaciones para la madre y el niño, y puede salvar hasta 1,8 millones de vidas cada año.
Pero la realidad indica que cerca de 222 millones de mujeres de todo el mundo que no desean quedarse embarazadas, no tienen acceso a la contracepción.
Este año, se calcula que habrá cerca de 80 millones de embarazos sin atender o mal planificados en los países en desarrollo.
La corresponsal de la BBC Emily Buchanan explica que en una clínica de una región pobre en el norte de Liberia un tercio de todos los bebés que nacen tienen madres de entre 15 y 19 años. Algunas no superan los 13.
Uno de los directores de proyecto de Save the Children en el lugar, George Kijana, le dijo a la BBC que estas madres tan jóvenes están expuestas a muchas complicaciones médicas.
"El cuerpo de estas jóvenes no está preparado, pueden desarrollar fístulas por un parto prolongado", lamenta. Una fístula causa mucho dolor e incontinencia y las niñas a menudo son relegadas al ostracismo por parte de sus familias.
Sus bebés también corren más riesgos, añade Kijana, que explica que tienen más opciones de morir si la madre es menor de 18 años.
Durante años, los programas de planificación familiar han luchado para encontrar financiación y apoyo a sus programas, al tiempo que la derecha religiosa de muchos países, y no todos ellos desfavorecidos, se ha opuesto a estas iniciativas.
Líderes internacionales se encontrarán en Londres el mes que viene para una conferencia sobre planificación familiar en la que el gobierno británico y la Fundación Bill y Melinda Gates serán los anfitriones.
Además, la agencia estadounidense de ayuda al desarrollo USAID, en cooperación con los gobiernos de India y Etiopía, ha hecho un llamado global a la acción para poner fin, en una generación, a las muertes evitables de niños.
Save the Children llama a los legisladores a respaldar este audaz objetivo y valora la planificación familiar como parte clave de la solución junto con otras inversiones en salud, nutrición y educación para niñas.
Satisfacer la necesidad global de contracepción puede prevenir el 30% de muertes maternas y el 20% de muertes de recién nacidos en los países en desarrollo, además de salvar potencialmente 649.000 vidas al año.


Más información: El poder y las promesas de la educación de las niñas

domingo, 8 de julio de 2012

Probabilidad de fallo de los métodos anticonceptivos: Uso normal y uso idóneo

La eficacia de los métodos anticonceptivos se puede medir en dos condiciones de uso generales: uso normal y uso idóneo. El uso normal puede implicar una utilización incorrecta e irregular, mientras que el uso idóneo supone una utilización correcta y sistemática.
La finalidad de esta revisión es poner al día los cálculos anteriores de fallo de los métodos anticonceptivos utilizados en ambas condiciones en relación con todos los métodos anticonceptivos disponibles en Estados Unidos. Los cálculos de las probabilidades de embarazo durante el primer año de uso normal de anticonceptivos se realizaron a partir de una encuesta nacional de aumento familiar de 1995 o de 2002, así como de evidencias fruto de otras encuestas e investigaciones clínicas.  
Se consideró que los métodos presentaban una efectividad mínima si se asociaban a una cifra de unos 25 embarazos por 100 mujeres en 1 año con un uso normal; los métodos anticonceptivos incluían espermicida y métodos de concienciación sobre la fertilidad, marcha atrás y esponja. Se consideró que los métodos presentaban una efectividad máxima si se asociaban a una cifra inferior a 1 embarazo por 100 mujeres en 1 año con un uso normal; los métodos anticonceptivos incluían dispositivo intrauterino, implantes, esterilización femenina y vasectomía.
Se generaron índices de fallo estimados durante el uso idóneo de cada uno de los métodos; sin embargo, se requieren estudios adicionales para mejorar el conocimiento de los índices de fallo durante el uso idóneo. La eficacia de los métodos que dependen del cumplimiento de unas pautas varía enormemente debido a las diferencias en cuanto a la predisposición al uso idóneo del método en cuestión.
Los índices de embarazo durante el uso idóneo revelan el grado de efectividad que pueden ofrecer los métodos anticonceptivos cuando se usan de forma sistemática y correcta según las instrucciones, mientras que los índices de embarazo cuando se realiza un uso normal revelan cómo los mismos métodos pueden resultar menos efectivos para una determinada persona que no siempre los utiliza de forma sistemática o correcta. Trussell J. Contraceptive failure in the United States. Contraception. 2011;83:397-404.

domingo, 1 de julio de 2012

Investigadores ponen a prueba diferentes calendarios de vacunación contra el VPH con niñas en edad escolar

Los programas de vacunación contra el virus del papiloma humano (VPH) suelen requerir la inyección intramuscular de tres dosis de la vacuna cuadrivalente en los meses 0, 2 y 6. La necesidad de administrar tres dosis en un periodo de 6 meses se ha identificado como un posible obstáculo para la generalización de la vacuna en los países en vías de desarrollo, lo que ha llevado a algunos especialistas a proponer calendarios de vacunación más amplios como solución práctica.
En este estudio aleatorizado de no inferioridad, los investigadores estudiaron la inmunogenicidad y la reactogenicidad de cuatro calendarios de vacunación contra el VPH en niñas con edades comprendidas entre 11 y 13 años de 21 colegios situados en una región muy montañosa del noroeste de Vietnam. Un total de 903 niñas se asignaron aleatoriamente a uno de cuatro grupos: el calendario de vacunación normal (que recibieron la vacuna contra el VPH en los meses 0, 2 y 6) o uno de los tres calendarios de vacunación más largos (que recibieron la vacuna en los meses 0, 3 y 9, en los meses 0, 6 y 12 y en los meses 0, 12 y 24).
Partiendo de los títulos medios geométricos (TMG) anti-VPH en suero de VPH-16 y VPH-18, los criterios de no inferioridad prefijados en comparación con el calendario convencional se cumplieron en dos de los tres grupos de calendarios alternativos: el de las niñas que recibieron la vacuna en los meses 0, 3 y 9 y en los meses 0, 6 y 12. Los criterios de no inferioridad no se cumplieron en el grupo que recibió la vacuna en los meses 0, 12 y 24 en comparación con el calendario convencional. Las niñas de todos los grupos toleraron bien la vacuna. El dolor en el punto de inyección fue el acontecimiento adverso notificado con más frecuencia. 
Como conclusión, los investigadores apuntaron que «entre las niñas adolescentes de Vietnam, la administración de la vacuna contra el VPH siguiendo un calendario convencional y calendarios alternativos resultó inmunogénica y fue bien tolerada».  
Neuzil KM, Canh DG, Thiem VD, et al. Immunogenicity and reactogenicity of alternative schedules of HPV vaccine in Vietnam. JAMA. 2011;305:1424-31.